Contratos Ley 2.0, reivindicación de la negociación por industria

México cuenta con una regulación única en materia de negociación colectiva sectorial, la cual busca asegurar mejores salarios, prestaciones laborales y protecciones contra los impactos del mercado a favor de las personas trabajadoras que laboran en alguna de las industrias consideradas en los Contratos Ley.

El Contrato Ley resguarda los derechos de las personas trabajadoras mediante el establecimiento de condiciones laborales uniformes, es decir, que son aplicables a todas las empresas del mismo ramo o sector económico y/o industrial, ya sea a nivel nacional o en ciertas entidades federativas y tiene efectos de la ley, lo que hace que su cobertura tenga más impacto y que su observancia no se preste a la buena voluntad de la partes.

En México, durante sus primeros años de vigencia, el Contrato Ley fue utilizado como una importante herramienta para evitar injusticias sociales, inclusive fue considerado por algunos autores como un acto de derecho social. Sin embargo, debido al avance de las políticas de libre mercado, el Contrato Ley no caminó a la par y se mantuvo con un número acotado de ramas industriales. Actualmente, sólo se cuenta con Contratos Ley que regulan las industrias Textil, Hulera, Azucarera y de Radio y Televisión.

El Contrato Ley de la Industria de la Transformación del Hule en Productos Manufacturados recientemente ha reactivado la discusión pública en torno a la necesidad de renegociar o realizar revisiones al último de los acuerdos llevados por los sectores patronal, obrero y gubernamental. Los beneficios que lograron las personas trabajadoras de Goodyear, San Luis Potosí, han motivado a otros trabajadores a buscar que se reconozca la aplicación del Contrato Ley de la Industria de la Transformación del Hule en Productos Manufacturados en sus centros de trabajo.

Dicho Contrato Ley no ha sido revisado desde 2017, contrario a sus homólogos que fueron revisados en 2023 y 2024 con incrementos salariales y mejoras en las prestaciones. Por ejemplo, el recientemente aprobado Contrato Ley de la Industria Textil (Seda y Fibras Sintéticas) establece que el salario mínimo para la industria sea de 280 pesos diarios, es decir, 31.07 pesos más. También establece un incremento salarial de 6.25% y un 0.5% al Fondo de Ahorro, lo que hace que este último sea del 1.5%.

En el caso del Contrato Ley de la industria Azucarera, se acordó un incremento salarial y a prestaciones del 5.5%, así como un incremento al salario por única ocasión del 2%. En la rama de Radio y Televisión se esperan nuevas revisiones en tanto la vigencia del último convenio de revisión concluyó en enero de 2024.

Con estos avances y retos, los Contratos Ley viven una etapa 2.0 o de renovación. Pese a las circunstancias que les dieron vida en el siglo XIX, su naturaleza jurídica podría ofrecer un atractivo para las necesidades comerciales actuales, las cuales buscan no sólo un intercambio efectivo sino también protecciones a los derechos laborales.

México tiene mucho que aprender de España y Francia, países que tienen un avance importante en negociación colectiva sectorial o por industria, en el cual se han identificado mejores beneficios tanto para el sector obrero como para el patronal.